Ya ha caído la noche, la hora mágica, la hora en que los sueños se acercan a mí, la hora en que me traspasan, la hora en que cierro los ojos y recuerdo, la hora en que me apetecería estar acompañado, la hora en la que estoy solo en mi camarote.
Es la hora de Benedetti, la hora de relajarme, la hora de desear y no desear, la hora de recapacitar, la hora de preguntarme qué he hecho bien y qué he hecho mal, la hora de evadirme, la hora de seguir navegando, la hora del silencio, la hora de oír mis fantasmas, la hora de escribir, la hora de leer, la hora de amar, la hora de escuchar que dice el corazón, la hora de acariciar, la hora de contar un cuento, la hora de mirar la luna por si me dice algo, la hora de ver la Osa Polar, la hora de mirar al infinito y no ver nada, sólo mar, la hora de pensar dónde estará Itaca, la hora de crear o al menos intentarlo, la hora de imaginar cómo será aquello que imagino, la hora de la utopía, la hora de creer que mañana será posible un mundo mejor, la hora de creer en mí y la hora de dudar de mí.
Es la hora de dudar si sigo el rumbo correcto, dudar si el viento me lleva donde yo quiero llegar, dudar si mis sueños se harán realidad o siempre serán fantasía, dudar si existe la utopía o sólo existe la utopía en mi mente, dudar de mi fuerza para controlar mi barco, dudar de todo y dudar de nada, dudar de lo absoluto, dudar si soy un buen padre y un buen amigo de mis amigos, dudar de tantas cosas.
La soledad de la noche, el silencio de la noche te permite refugiarte en ti mismo con la tranquilidad de no ser molestado por ningún golpe de mar. La noche me proporciona la calma necesaria para encontrarme de nuevo e imaginarme cómo será Itaca.
Mientras escribo escucho a Carmen Mcrae, es la única voz que rompe el silencio de la noche, pero no me importa, esa voz me acaricia el alma y me reconforta.
Es la hora de Benedetti, la hora de relajarme, la hora de desear y no desear, la hora de recapacitar, la hora de preguntarme qué he hecho bien y qué he hecho mal, la hora de evadirme, la hora de seguir navegando, la hora del silencio, la hora de oír mis fantasmas, la hora de escribir, la hora de leer, la hora de amar, la hora de escuchar que dice el corazón, la hora de acariciar, la hora de contar un cuento, la hora de mirar la luna por si me dice algo, la hora de ver la Osa Polar, la hora de mirar al infinito y no ver nada, sólo mar, la hora de pensar dónde estará Itaca, la hora de crear o al menos intentarlo, la hora de imaginar cómo será aquello que imagino, la hora de la utopía, la hora de creer que mañana será posible un mundo mejor, la hora de creer en mí y la hora de dudar de mí.
Es la hora de dudar si sigo el rumbo correcto, dudar si el viento me lleva donde yo quiero llegar, dudar si mis sueños se harán realidad o siempre serán fantasía, dudar si existe la utopía o sólo existe la utopía en mi mente, dudar de mi fuerza para controlar mi barco, dudar de todo y dudar de nada, dudar de lo absoluto, dudar si soy un buen padre y un buen amigo de mis amigos, dudar de tantas cosas.
La soledad de la noche, el silencio de la noche te permite refugiarte en ti mismo con la tranquilidad de no ser molestado por ningún golpe de mar. La noche me proporciona la calma necesaria para encontrarme de nuevo e imaginarme cómo será Itaca.
Mientras escribo escucho a Carmen Mcrae, es la única voz que rompe el silencio de la noche, pero no me importa, esa voz me acaricia el alma y me reconforta.
8 comentarios:
Eres como un caballo de batalla, una tras otra peleandote contigo ... Es muy dificil convivir con el yo y aguantarse a uno mismo, no se si la vida y las experiencias vividas ayudan, no se si existe un manual para superarse, pero en la soledad de cada uno es cuando aparecen los miedos, la incertidumbre, las dudas, etc... Como se puede pelear contra ello y salir airoso????
"Es la hora de vivir"
Como nos gusta Benedetti.
Aleteos!
ANONIMO:
Creo que es difícil pelear contra uno mismo y salir airoso.
ELENABERENICE:
lo primero darte las gracias por pasarte en mi camino hacia Itaca y segundo tienes razón, se me olvidó lo más importante ES LA HORA DE VIVIR.
ABEJITAS:
Como siempre un placer teneros por aquí, mi próximo post va a ser un poema de Benedetti dedicado a vosotras.
Gracias por explicarme como subir el video.
un abrazo a todos
Xavi, cuando se llega a vivir en paz con uno mismo supongo que desaparecen las peleas... Lo malo es que cada uno tenemos que descubrir como lograrlo, no hay una formula magica para todos. Lo importante es conocerse muy bien y no tener miedo a bucear en nuestro yo.
Por otro lado, deberiamos diferenciar entre vivir simplemente, y disfrutar de la vida. Yo pienso que para vivir la vida no hay que temer a la realidad...
Creo que uno jamás llega a conocerse del todo.
un saludo
completamente de acuerdo, xavi, tu última frase me ha llegado, a veces estamos una vida con una persona y nos topamos con algo que no esperabamos, al igual que nosotros, creemos que nos conocemos y que tenemos ciertas limitaciones pero a veces nos sorprendemos con lo que hacemos.
me gusta leerte, me haces reflexionar, no sé, estoy un poco espesa hoy
un¡ beso
GUADA:
Para mí escribir es un auténtico placer y una forma de vivir en mi pequeño mundo, si encima tengo la inmensa suerte de que a alguien le gusta lo que escribo...¿qué más se puede pedir?, lo único que puedo decir es GRACIAS.
Un saludo
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