El 17 de septiembre de 2007 escribí mi primera entrada en un mundo totalmente desconocido hasta ese momento. En esos momentos jamás hubiera podido imaginar que esa fecha pasaría a formar parte de mi vida. Ahora son las 00:10 del 26 de agosto y estoy escribiendo la que durante un tiempo creo que será la última entrada, aunque no sé aún cuando la publicaré, quizás esta misma noche ¿quién sabe?
Como no podía ser de otra manera, mientras escribo, de fondo, tengo el inmenso placer de oír como las olas rompen suavemente sobre la arena de la playa. La noche está nublada y empieza a soplar un ligero mistral.
Últimamente no leo otros blogs ni contesto a los comentarios, a excepción del blog de Sara (escribí un comentario porque necesitaba hacerle saber que en esos duros momentos del avión accidentado podía contar conmigo). Me ha costado no entrar, tanto o más como no responder a vuestros comentarios, pero egoístamente creí, y sigo creyendo, que era la forma más fácil de ir soltando amarras. Sería menos doloroso.
Durante este año he tenido la inmensa suerte de conocer personas formidables, personas que me han brindado su apoyo cuando he estado metido en un pozo sin fondo, personas con las que tengo, y tendré, una deuda pendiente. El día tres de septiembre, después de muchos meses de baja, me incorporo al trabajo y a la rutina diaria, a compartir mi vida con una persona enferma de alzheimer y lo cierto es que tengo miedo a hundirme de nuevo, a no saber afrontar la dura realidad. En esos jodidos momentos vosotros siempre habéis estado a mi lado pero ahora debo ganar la batalla yo solo.
El motivo por el cual dejo el blog, al menos durante un tiempo, os puede parecer una tontería, pero quiero cumplir uno de mis sueños (ya que algunos se han quedado en el camino) escribir una novela. Siempre he soñado con escribir un libro y no me veo capaz de continuar con el blog y centrarme en escribir una historia. Quizás sea un esfuerzo inútil pero es un esfuerzo que sólo depende de mí y quiero intentarlo. A lo mejor pensáis que es compatible una cosa con otra pero os aseguro que para mí es imposible compaginar ambas cosas a la vez. Siempre he sido consciente de mis limitaciones, seguramente una persona inteligente sería capaz de llevar a buen término ambos proyectos pero os aseguro que no es mi caso. En fin, después de mucho meditarlo, creo que he tomado la decisión correcta…sólo espero que si algún día vuelvo sea para deciros que cumplí uno de mis sueños y si regreso sin haber logrado el objetivo propuesto no me tengáis en cuenta el haberos abandonado.
En esta vida hay deseos que implican a otras personas y eso hace más difícil llevarlos a cabo, pero este sueño sólo me incumbe a mí, con lo cual sólo yo asumo el éxito o fracaso de mi decisión.
Me he hecho socio de la AEN (Asociación de Escritores Noveles). Hace unos meses conocí a una excelente persona, que por cierto está escribiendo su primera novela, y después de leer mis relatos cortos me animó a que me pusiera en contacto con esta asociación. Aún no sé como me irán las cosas pero quiero intentarlo.
Mentiría si dijera que no me duele abandonar este mundo que algunos llaman virtual, pero que para mí es real, al menos así lo he sentido yo, pero ahora toca cambiar de rumbo e intentar llegar a Itaca por otro camino. Desconozco qué me deparará el destino, qué mares habré de surcar pero creo que lograré cumplir mi sueño, mi pequeño sueño.
No quiero despedirme de vosotros sin daros las gracias por todos los buenos momentos que me habéis brindado. Por vuestra compañía os regalo unas fotos de un día de navegación con levante, os muestro mi pueblo desde la mar y la cueva del lobo marino.
Como no podía ser de otra manera, mientras escribo, de fondo, tengo el inmenso placer de oír como las olas rompen suavemente sobre la arena de la playa. La noche está nublada y empieza a soplar un ligero mistral.
Últimamente no leo otros blogs ni contesto a los comentarios, a excepción del blog de Sara (escribí un comentario porque necesitaba hacerle saber que en esos duros momentos del avión accidentado podía contar conmigo). Me ha costado no entrar, tanto o más como no responder a vuestros comentarios, pero egoístamente creí, y sigo creyendo, que era la forma más fácil de ir soltando amarras. Sería menos doloroso.
Durante este año he tenido la inmensa suerte de conocer personas formidables, personas que me han brindado su apoyo cuando he estado metido en un pozo sin fondo, personas con las que tengo, y tendré, una deuda pendiente. El día tres de septiembre, después de muchos meses de baja, me incorporo al trabajo y a la rutina diaria, a compartir mi vida con una persona enferma de alzheimer y lo cierto es que tengo miedo a hundirme de nuevo, a no saber afrontar la dura realidad. En esos jodidos momentos vosotros siempre habéis estado a mi lado pero ahora debo ganar la batalla yo solo.
El motivo por el cual dejo el blog, al menos durante un tiempo, os puede parecer una tontería, pero quiero cumplir uno de mis sueños (ya que algunos se han quedado en el camino) escribir una novela. Siempre he soñado con escribir un libro y no me veo capaz de continuar con el blog y centrarme en escribir una historia. Quizás sea un esfuerzo inútil pero es un esfuerzo que sólo depende de mí y quiero intentarlo. A lo mejor pensáis que es compatible una cosa con otra pero os aseguro que para mí es imposible compaginar ambas cosas a la vez. Siempre he sido consciente de mis limitaciones, seguramente una persona inteligente sería capaz de llevar a buen término ambos proyectos pero os aseguro que no es mi caso. En fin, después de mucho meditarlo, creo que he tomado la decisión correcta…sólo espero que si algún día vuelvo sea para deciros que cumplí uno de mis sueños y si regreso sin haber logrado el objetivo propuesto no me tengáis en cuenta el haberos abandonado.
En esta vida hay deseos que implican a otras personas y eso hace más difícil llevarlos a cabo, pero este sueño sólo me incumbe a mí, con lo cual sólo yo asumo el éxito o fracaso de mi decisión.
Me he hecho socio de la AEN (Asociación de Escritores Noveles). Hace unos meses conocí a una excelente persona, que por cierto está escribiendo su primera novela, y después de leer mis relatos cortos me animó a que me pusiera en contacto con esta asociación. Aún no sé como me irán las cosas pero quiero intentarlo.
Mentiría si dijera que no me duele abandonar este mundo que algunos llaman virtual, pero que para mí es real, al menos así lo he sentido yo, pero ahora toca cambiar de rumbo e intentar llegar a Itaca por otro camino. Desconozco qué me deparará el destino, qué mares habré de surcar pero creo que lograré cumplir mi sueño, mi pequeño sueño.
No quiero despedirme de vosotros sin daros las gracias por todos los buenos momentos que me habéis brindado. Por vuestra compañía os regalo unas fotos de un día de navegación con levante, os muestro mi pueblo desde la mar y la cueva del lobo marino.
Os deseo lo mejor.